El pobre tipo estaba tocando sus bongoes, algo axial como haciéndole la base a la Boa Marley, a todo volumen. Empezó a preocuparse por el ruido que estaba haciendo, si molestaría a los vecinos o algo, justo cuando sonó el timbre. Pensó lo peor, si eran ladrones, secuestradores, terroristas, policías o los vecinos, básicamente interpretó el juego de video Counter Strike en su desnuda mente. Era para entregarle un lavarropas a su vecina, quien no respondia el timbre. Sin meditarlo demasiado fue a llamar su vecina. En su total desnudez. Le dijo con total naturalidad:
-Elena le trajeron un lavarropas.
Elena le dio las gracias
No contento con esto, ayudó en la descarga e instalación del lavarropas. Recuerdo, en su total desnudez.
Cuando los técnicos instaladores comenzaron a verse complicados con el despliegue tecnológico de última generación. Recuerdo, instalaban un lavarropas.
El pobre tipo dijo enfáticamente:
- Es el BIOS….! O es que necesita una actualización de Firmware o no hay Internet….!
- Mmmm. Puede ser, puede ser, habría que verlo.- Respondió unos de los instaladores.
Con su ropa maloliente de sucia. Finalmente, luego de unos meses, Elena pudo utilizar el lavarropas durante dos años y pico.
El pobre tipo al fín comprendió por que Elena cada dos años y pico anda sola en camisón regando las plantas.
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