martes, 3 de agosto de 2010

de "Que una lágrima en el mar" (Manés Sperber)

"...pero el no era libre de imaginar ningún tipo de futuro, de visualizar un mañana que no fuera ensombrecido por sus días pasados. No era libre de escapar de la intranquilidad de su propia existencia."
"...esperaba por paz, sin ninguna esperanza de encontrarla alguna vez, ni siquiera sabía que era lo que buscaba en realidad. Una y otra vez tuvo una visión sin sentido y que era la única que tenía un efecto sobre el, cercano al consuelo. Era un mundo sin vida, sin movimiento, un desierto de nieve en el cual ninguna luz caía, sobre el cual ningún cielo se extendía. El se vió a si mismo caminando este desierto - el único movimiento en este mundo muerto donde el tiempo no existía."
"...creía que la felicidad podría ser el objetivo y justificación de la humanidad...pero si el hombre no era nada - al menos otra cosa mas que un objeto de disgusto...entonces que significaría su felicidad o su justificación...? Pero si no era una cuestión de humanidad - entonces que se mantenía...?"

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